
© Ana Himes, www.facebook.com/ana.himes/
El valle de la muerte
Podríamos marcar como un primer corte histórico para pensar lo nuevo el célebre último verso del poema «El viaje» de Las Flores del Mal (1861): «Sumergirnos en el fondo del abismo, Infierno o Cielo, ¿qué importa? ¡Hasta el fondo de lo Desconocido, para encontrar lo nuevo!». El culto a lo nuevo1 de Baudelaire sigue siendo nuestro horizonte, el que nos conmina a innovar lanzándonos a otro ciclo de destrucción creadora, como podrían haber dicho Marx o Schumpeter, y como diría hoy David Harvey.
Para leer este artículo completo COMPRA ESTE NÚMERO o SUSCRÍBETE A LA REVISTA
Si ya lo has comprado o eres suscriptor Inicia sesión