
Gastropoda #XI, Joan Fontcuberta, 2014. © Joan Fontcuberta/cortesía del artista
Se ha dicho mucho que la filosofía y la literatura comparten los mismos intereses: tratar de averiguar qué es esto de una existencia con un destino siempre limitado de antemano. Aunque sabemos que el azar ocupa más espacio que la propia deliberación en la precariedad de existir, no dejamos de hacernos las preguntas kantianas de ¿qué puedo saber? ¿Qué debo hacer? ¿Qué puedo esperar? ¿Qué es el ser humano? Preguntas, y ya me adelanto hacia donde quiero ir, que requieren como condición previa una mirada honesta y competente sobre la realidad.
Para leer este artículo completo COMPRA ESTE NÚMERO o SUSCRÍBETE A LA REVISTA
Si ya lo has comprado o eres suscriptor Inicia sesión